
Rodney Arismendi
Nació en Río Branco, departamento de Cerro Largo, Uruguay, el 21 de Marzo de 1913.
Desde muy joven desarrolló una militancia social y política en su departamento natal. Fue dirigente estudiantil y tuvo una intensa participación en la lucha contra la dictadura de Gabriel Terra (1933). En los años 30 ingresó al Partido Comunista de Uruguay (PCU).
Incursionó en el periodismo como redactor responsable del Diario Popular, vocero de la unidad antifascista, y Director de Justicia, periódico del PCU.

José Luis Massera
Nació en Italia, en la cuidad de Génova, el 8 de junio de 1915. Se afilió al Partido Comunista del Uruguay (PCU) en 1942. Al respecto, nos relata: "En 1955 el PCU atravesó una grave crisis, su Secretario General fué expulsado por el Comité Central que yo integraba, y reemplazado por Rodney Arismendi, viejo amigo mío, cuyo informe fue removedor." Entre 1963 y 1972 Massera fue diputado nacional, por la lista 1001, del Frente Izquierda de Liberación Nacional, el FIDEL. En ese período, se destacó por sus iniciativas parlamentarias en defensa de los trabajadores; la defensa de la Universidad de la República dentro y fuera del parlamento; y por su participación en la fundación del Frente Amplio de Uruguay.

Rita Ibarburu
Miembro de la dirección del PCU, responsable de la Revista Estudios. Torturada, encarcelada y sometida a trabajos forzados durante ocho años.

Alfredo Gravina
Nació en (Tacuarembó, 31 de octubre de 1913 - Montevideo, 1995) fue un escritor, hombre de teatro y periodista uruguayo.
Fundó y dirigió la Gaceta de Cultura, que se publicó en Montevideo entre septiembre de 1955 y abril de 1957. Colaboró en los periódicos El Popular, La Hora y La Hora Popular. Militante del partido comunista, la obra de Gravina ha sido traducida al alemán, ruso, ucraniano, búlgaro, rumano, eslovaco y chino.

José Jorge Martínez
Nació él (16 de junio de 1931, Montevideo- 23 de junio de 2003) fue funcionario de la Udelar y asistente académico del rector Rafael Guarga. Su vínculo con la Udelar comenzó el 8 de setiembre de 1954, cuando ingresó por concurso como funcionario Oficial 5°, asignado a la Facultad de Arquitectura. Tres años después, ascendió-por concurso de pruebas- a Oficial Administrativo 4°. Durante su tiempo como funcionario recibió varios reconocimientos a su desempeño de los Decanos Aurelio Lucchini, Leopoldo Artucio y Carlos Reverdito y del Rector Mario Cassinoni, entre otros. Al momento que trabajaba como funcionario, Martínez comenzó a estudiar arquitectura-cursó entre 1956 y 1960 aprobando 8 asignaturas- y a militar en el Centro de Estudiantes de esa facultad (C.E.D.A.) donde llegó a ser secretario general. Desde su rol, tuvo una destacada participación en el movimiento por la Ley Orgánica de la Universidad y contribuyó con el célebre Plan de estudios de 1952. Durante la década de los 60 Martínez se integró al Frente de Izquierda de Liberación y al Partido Comunista (PCU). Además, inició su actividad como periodista, convirtiéndose en uno de los pioneros del periodismo de investigación en nuestro país. Para fines de los 60 publicó su primer libro La telaraña bancaria en el Uruguay (1969) compuesto de una serie de artículos suyos publicados en el diario del PCU El Popular a lo largo de 1968. En este diario publicó un centenar de editoriales y artículos, y llegó a ser su subdirector. Continuando con su actividad militante, integró el Comité Central del PCU, estuvo presente en el Congreso del Pueblo y participó del proceso unitario del movimiento sindical uruguayo del que surgió la CNT (1966), presenció la Conferencia de la OLAS (1967) en la Habana y actuó en la constitución del Frente Amplio (1971). Luego del golpe de Estado de 1973, el 9 de julio de ese mismo vivió el allanamiento de El Popular, donde sufrió golpizas junto a otros de sus periodistas y operarios. Luego de este suceso, Martínez trabajó en la prensa clandestina hasta 1975, cuando fue detenido y torturado durante 37 días para luego ser recluido, primero en un cuartel y luego en el Penal de Libertad, durante nueve años. Al recuperar su libertad, volvió a desempeñarse como periodista y militante. Además, en el marco de la reinstitución democrática se reincorporó a la Udelar el 18 de junio de 1985, esta vez con un cargo interino de Secretario del Instituto de Higiene, y luego el 1 de abril de 1986 regresó a su cargo de Jefe de Sección. En esta segunda etapa de su carrera periodística fue encargado de la sección internacional de El Popular, que para entonces se había convertido en un semanario, y del suplemento político-ideológico del diario La Hora, y más adelante dirigió el semanario La Hora Popular hasta su último número el 31 de enero de 1992.

Luis Pedro Bonavita
Ensayista y cronista nacido en San José. De origen blanco, al igual que su cuñado y amigo Francisco Espínola, a partir de 1948 fue redactor responsable del diario El País por siete años. Con el cambio hacia posturas políticas de izquierda -influido por el golpe de Estado en Guatemala de 1954 y la revolución cubana- pasó a escribir en Época en 1961 y a atender en Marcha una columna semanal de temas agropecuarios, materia que conocía: había sido Subsecretario de Ganadería y Agricultura durante el gobierno de Juan José de Amézaga (1943-1945) y miembro del Directorio del Frigorífico Nacional (1959-1961). Fue uno de los fundadores del Frente Amplio en 1971, pero falleció en Montevideo poco antes de las elecciones de ese año. Previamente, se había presentado como candidato a senador del Frente de Izquierda de Liberación en 1962 (del cual fue Presidente) y ocupó una banca en la Cámara de Representantes en el período 1966-1971. Aunque en 1958 había publicado La sangre de Quinteros (que recoge la polémica sostenida con su tío, el historiógrafo batllista Luis Bonavita) desde el punto de vista ensayístico, Luis Pedro Bonavita fue esencialmente autor de un solo libro: Crónica general de la Nación, de ese mismo año. De acuerdo a Carlos Real de Azúa se convirtió en un ‘éxito de librería y de opinión''. La obra se inspiró en una línea revisionista de nuestro pasado. Entre los temas tratados en este trabajo pueden señalarse, por ejemplo: la significación de las políticas de Artigas frente a los intereses de Montevideo, el campesinado, la estancia, el latifundio, el tercerismo internacional, la posición antiimperialista centrada en los Estados Unidos y su visión de una dimensión humana del país, alejada de todo ‘’gigantismo'. Completan su obra, Crónicas del pago chico (1966) y Las barras del día (1969). En 1950 integró la comisión nombrada por ley- a cargo de las celebraciones por el centenario de la muerte de Artigas. Su hermana fue la poeta María Adela Bonavita, que falleciera a los 34 años.