Edmundo Ángel Rovira Sauro
Datos Personales:
Documento de Identidad: 952.132.
Credencial Cívica: AZB 7480.
Edad: 57 años.
Fecha de nacimiento: 22.04.1923.
Lugar: Mercedes, Departamento de Soriano.
Nacionalidad: Uruguaya.
Estado civil: Casado.
Domicilio: Ramón Massini N° 3196, apartamento 402.
Ocupación: Periodista del diario “El País” y “La Mañana”. Funcionario del Ministerio de Industria y Energía.
Alias: Larre o Larry, Fonseca.
Militancia: Partido Comunista (PCU), Frente Amplio (FA).
Detención
Fecha: 21.01.1976.
Lugar: A la salida del diario en donde trabajaba.
Hora: alrededor de las 03:00 de la madrugada.
Circunstancia: Según el testimonio de su hermana, Olga Rovira, -aportado a través de Marys Yic-, fue detenido posiblemente a las 03:00 de la madrugada del 20 de enero a la salida del diario en donde trabajaba.
Días previos a su detención efectivos militares habían ido hasta su casa. Una vecina del lugar les había dicho que no estaban y que habían salido de vacaciones. Luego de ello, van a comunicarle al trabajo lo sucedido. “Edmundo Rovira vuelve a su casa a esperar a su esposa con una maleta pronta para que ella se fuera a Buenos Aires (donde ya tenían pasajes para ir de vacaciones). Su esposa viajó de inmediato con la esperanza que su esposo llegaría en un par de días.”2
Reclusión: Grupo de Artillería Nº 5, Batallón de Infantería N° 4 (Colonia), Establecimiento Militar de Reclusión Nº 1 (E.M.R. Nº 1/ Penal de Libertad. Trasladado el 13.09.1976). El 3 de agosto de 1978 es retirado del E.M.R. Nº 1 por el Jefe del Departamento Nº 5 de la DNII, Oficial Principal Yamandú Estilano, para ser reinterrogado, regresando posteriormente al Establecimiento.
Atribuído a: Grupo de Artillería N° 5. Jefe de la Unidad, Tte. Cnel. Güelfo D’Andrea.
Casos conexos: El régimen militar desplegó a partir de octubre de 1975 una profunda persecución y represión contra toda la estructura orgánica del PCU. Todo indica que se trató de una decisión política adoptada en las más altas esferas de la cúpula militar. Esta operación a gran escala fue denominada en la jerga represiva como “Operación Morgan” y su epicentro fue la estructura del partido (Comité Central, finanzas y propaganda y demás). Para llevar adelante dicha operación, se recurrió a la detención de sus dirigentes y militantes. Es importante aclarar que la misma combinó, en forma paralela, sobre todo a partir de enero-febrero y hasta junio de 1976, la represión a la Unión de Juventudes Comunistas (UJC). Las acciones represivas fueron implementadas por el Órgano Coordinador de Operaciones Antisubversivas (OCOA). Este órgano operaba bajo la órbita de la División de Ejército I cuyo comandante era por entonces el Gral. Esteban Cristi, siendo el segundo jefe al mando el Cnel. Julio César González Arrondo. Fue por entonces que el OCOA comenzó a utilizar centros clandestinos de detención (CCD). Los detenidos eran allí interrogados mediante brutales torturas, permaneciendo en ellos varios meses en calidad de “desaparecidos”, luego de lo cual la mayor parte eran conducidos ante el Juez Militar. Los CCD utilizados durante la Operación “Morgan” fueron conocidos con el nombre de “Infiernos”, los que también fueron utilizados en la represión contra militantes de otras organizaciones izquierdistas. En un comienzo se usó la casa ubicada en Punta Gorda, en Rambla República de México N° 5515, también conocida como “300 Carlos R” o “Infierno Chico” y la casa conocida como “Cárcel del pueblo”, utilizada hasta 1972 por el MLN-T para retener secuestrados, situada en la calle Juan Paullier. Pero el día 2 de noviembre por la madrugada, las decenas de militantes que se encontraban detenidos en esos CCD fueron trasladados en camiones militares a inaugurar un tercer CCD, que sería conocido como “300 Carlos”, “El Infierno Grande” o “La Fábrica”3, emplazado en los galpones del Servicio de Material y Armamento (SMA), en los fondos del Batallón de Infantería Blindada Nº 13, sito en Avenida de las Instrucciones 1325, muy próximo a la vía férrea que une Peñarol con Manga. Tanto el Batallón como el SMA dependían directamente del Comando General del Ejército. Allí los detenidos tenían adjudicado un número por el cual eran llamados y que les era colgado del cuello, para convocarlos a las sesiones de tortura. En coherencia con el carácter “clandestino” de las operaciones, en estos CCD los represores actuaban de manera compartimentada, utilizando el alias de “Óscar” acompañado por un número. Entre las decenas de detenidos y torturados en estos CCD, doce fueron asesinados bajo torturas o murieron como secuela de las mismas en prisión en los años siguientes: Óscar Bonifacio Olveira Rossano, Nuble Donato Yic, Norma Aída Cedrés de Ibarburu, Carlos María Argenta Estable, Luis Alberto Pitterle Lambach, Emilio Fernández Doldán, Hugo Pereyra Cunha, Julián Basilicio López, Miguel Almeida Molina, Hilda Sara Delacroix Scaltriti de Ormaechea, Gerardo Cuesta y Silvina del Carmen Saldaña Lapeira.
Nueve militantes fueron desaparecidos: Eduardo Bleier, Juan Manuel Brieba, Fernando Miranda Pérez (restos recuperados de su tumba clandestina el 2 de diciembre de 2005), Carlos Pablo Arévalo Arispe, Julio Gerardo Correa Rodríguez, Otermín Laureano Montes de Oca Doménech, Horacio Gelós Bonilla, Lorenzo Julio Escudero Mattos y Ubagesner Chaves Sosa. Este último caso correspondió a una operación conducida por oficiales de la Fuerza Aérea, presumiblemente en el contexto de la coordinación represiva (sus restos fueron recuperados de su tumba clandestina el 29 de noviembre de 2006).
No resulta evidente el momento de clausura de la Operación “Morgan”. Si nos atenemos al funcionamiento del principal CCD utilizado, las fuentes disponibles permiten considerar que hacia fines de 1976 o principios de 1977, el “300 Carlos” habría sido clausurado y los últimos detenidos en el lugar trasladados el CCD de “La Tablada”.
Proceso Judicial
25.06.1976. Juzgado Militar de Instrucción de 4° Turno. Procesado por el Art. 60 (V) del Capítulo VI BIS del C.P.M.
19.08.1980. Supremo Tribunal Militar. Sentenciado a 5 años y 3 meses de penitenciaría.
Fallecimiento
Fecha de muerte: 18.11.1980.
Lugar: Hospital Central de las Fuerzas Armadas.
Circunstancia: En julio de 1977 comienza a consultar en la policlínica cardiológica, presentando dolor retroesternal opresivo luego de realizar esfuerzos o de caminar. Era hipertenso, recibiendo tratamiento desde hacía un año. El 21 de mayo de 1979, mientras realizaba tareas que requerían considerable esfuerzo, sufrió una intensa crisis de disnea acompañada de mareos. El Médico del Servicio Sanitario del E.M.R. Nº 1, Tte. 2º (SM-M) Alberto Chiarino, no descartó la posibilidad de un infarto al miocardo, indicándole reposo y entregándole al médico del Sector un aparato de presión para que fuera controlado. Posteriormente es internado en el H.C.FF.AA. regresando el 31 de mayo, sin medicación.
El 10 de noviembre de 1980 es enviado nuevamente al H.C.FF.AA., por el Médico de Servicio del E.M.R. Nº 1, Alférez Juan C. Sosa, al presentar “cefalea intensa de comienzo brusco con ictus.”
Finalmente el 18 de noviembre de 1980 desde el Hospital Central de las Fuerzas Armadas se envía un radio (Nº 3173) informando de su fallecimiento.
En la historia clínica del E.M.R. Nº 1 se consigna, a través de un documento manuscrito firmado por “Costa”, sin ninguna otra referencia, lo que significa “Enclavamiento amigdalino” y el “accidente vascular encefálico” que produjo la muerte de Edmundo Rovira.
Certificado de defunción: N° 0222750. Señala que falleció el 18 de noviembre de 1980 a las 11.30 hs., consignando como causa de muerte: “Enclavamiento amigdalino AVE hemorrágico” Firmado por el Dr. Hugo Grastes.
Responsabilidad institucional (Efectivos en Unidades Militares, Policiales y Centros de detención y reclusión)